Premios Dominio de Nobleza Crianza Magnum
- Decanter 2017 World Wine Awards | SILVER
- Guía Peñín: 88 puntos
- Concurso Mundial Bruxelles: Medaille d´Or Gold Metal
FICHA DE CATA
- Fase Visual: Vino vestido con un bonito color rojo rubí, de capa media-alta, y ribete atejado.
- Fase Olfativa: La olfacción directa es especiada, vainilla y coco, notas ahumadas y torrefactos. Muy bien ensamblado, con un fondo de fruta roja madura y confitura. Franco y potente. En vía retronasal muestra su potencia aromática, largo y complejo.
- Fase Gustativa: Se trata de un vino con un ataque amable, amplio y redondo. De buen cuerpo, en el paso por boca se manifiesta carnoso y potente. Con taninos presentes de calidad que le aportan carácter y estructura, y una acidez muy bien integrada. La sensación final es larga y placentera.
FICHA DE ELABORACIÓN
Vino procedente de uvas cultivadas en nuestros viñedos de Fuenmayor, con una edad superior a los 30 años. En una situación envidiable por su exposición y suave ladera, además de un adecuado terreno arcilloso-calcáreo. Nuestra experiencia en el manejo de la viticultura, nos permite realizar un excelente control de la producción, tanto en cantidad como en calidad, sin duda alguna, clave para obtener un vino de calidad.
Las variedades que lo componen son: 100% tempranillo.
Nuestros antepasados, a lo largo de las sucesivas generaciones familiares, ya elaboraban vinos en nuestras antiguas bodegas, con los métodos tradicionales de la zona.
Actualmente elaboramos este vino, empleando los más modernos sistemas: La uva se somete a rigurosos controles a la entrada en la bodega, antes de la descarga en la tolva de recepción.
Posteriormente la uva es despalillada (de modo que son eliminadas las partes herbáceas) y estrujada, quedando lista de esta manera para ser trasladada a los depósitos de fermentación.
Una vez en los mismos, se inicia la fermentación alcohólica, con un riguroso control de temperatura en torno a los 28ºC. En está fase se suceden los remontados y delestages periódicos; aplicando una maceración postfermentativa prolongada.
Concluida la fermentación alcohólica, se produce la fermentación malo-láctica, finalizando así los procesos biológicos que transforman las uvas en vino.
Tras varias trasiegas de limpieza, se mete en barricas de roble francés y americano de grano fino, donde permanece un año, con trasiegas cada seis meses.
Posteriormente se embotella sin tratamiento alguno, por lo que con el paso del tiempo, puede presentar algún precipitado, que no merma en absoluto su calidad. Permaneciendo en reposo una larga temporada, antes de salir al mercado.
